jueves, 26 de diciembre de 2013

¿Te acuerdas?

Decirlo se ha convertido en una costumbre de la que me he percatado y siempre me parecerá la cosa más absurda del mundo. 

"Nada como el liceo, lo extraño a muerte"

Ok, no.

Nunca estaré de acuerdo con el escándalo masivo que creó el descubrimiento del Bullying y el apoyo increíble que se ha ganado por parte de la mitad del mundo. Sí, es un problema. Sí, debemos tomarlo en cuenta pero utilizarlo como excusa para ofrecer galas de caridad y para mejorar tu cara ante la prensa me parece una completa y real mierda porque, aceptémoslo: En el liceo siempre hay un pendejo que te quiere hacer la vida imposible, y si no es así es porque te diste la gloria de ser la rata del grupo.

A la pendeja que siempre le tocó ser jodida desgraciadamente fui yo. Y aunque mi altura y la razón por la que "Gorda" era el adjetivo más bonito que usaban para joderme ayudó mucho a que el bullying se quedara en palabras desde lejitos ("Porque la gorda te va a joder" escuché muchas veces), la situación siempre me pareció incómoda y es una de las principales razones por las que el liceo se tiene que quedar allá enterrado en el pasado, sin volver nunca más.

El estatus que usamos en la secundaria para encajar difícilmente es alcanzado por la sociedad, y aquellos que se consideran dignos del mismo ya han sido catalogados por malos adjetivos por el simple hecho de que los pendejos que no tienen nada que hacer con su vida quieren hacer sentir mal a todo el que se le atraviese.

Otra de las razones, y aunque no la considero como prioritaria, merece su mención honoraria: PORQUE LA MIERDA DE LICEO FUE EL QUE DESENCADENÓ MI INCAPACIDAD DE DARLE UNA HISTORIA DE AMOR A MI ITALIANO PREPOTENTE. 

Gracias.

Sí, como leyeron. La mierda de liceo me convirtió en una defensa inquebrantable (La envidia de Gerard Piqué), y ahora mi historia difícilmente tendrá el final que merece con honores.

Las horas de estudio perdidas, las horas libres desperdiciadas, los proyectos innecesarios, las amistades falsas, los corazones rotos, los recuerdo indeseables... Todo este rollo se va enredando más y más, y allí es cunado me pregunto: ¿QUÉ COÑO LE PASA A ESOS QUE RECUERDAN EL LICEO COMO UNA ÉPOCA A LA CUAL RECORDAR CON CARIÑO?

Mi experiencia no fue buena, pero aunque lo hubiese sido nunca cambiaría ese borrón del pasado por un futuro a venir. Porque aunque el pasado es para recordarse, aferrarse siempre está contraindicado.

A esos que les hace falta el liceo les digo SIGAN ADELANTE Y DEJEN ESE MIEDO A QUERER MÁS Y SER MÁS. Aprendan de las estupideces pero no las repitan por el simple hecho de querer revivirlas en honor a "LA ÉPOCA DORADA DEL ESTUDIANTE".

PD: NUNCA ESCUCHEN SOMEBODY THAT I USED TO KNOW MIENTRAS ESCRIBEN. Agarren consejos... Pero para dormir si sirve.

Good night, loving cookies.

miércoles, 11 de diciembre de 2013

La engreída que quiere ser yo.

Verga, admiro a esa gente que puede escribir sin decir malas palabras ni usar un lenguaje coloquial.

Hace un tiempo me dije a mi misma que tenía que mejorar, y que iba a arreglar mi forma de hablar y expresarme. La cosa funcionó muy bien y ya hasta me estaba acostumbrando, hasta que me dijeron una estupidez a las dos horas y me arreché.

El sindrome de Tourette no diagnosticado que vive en mí floreció nuevamente y me di cuenta que no se debe arreglar lo que ya está bien (Ok, sé que no es así pero déjenme pensarlo un ratito más, no tanto por mi ego sino por mi pereza de limar la ordinariez que habita en mí)

A veces (Casi todo el tiempo pues) Me siento la persona más egocéntrica, equivocada y creída del mundo. La dominante detestable que preside mi asamblea mental y golpea a pepegrillo cada vez que ella está a cargo es una ladilla de persona, no la soporto y la quiero ahogar por el resto de la eternidad en un barril de petróleo podrido. Desafortunadamente, es 80% yo, y si la mato pareceré una clara de huevo sin sal, como esas que se come Sascha fitness en las mañanas. 

Tal vez soy la única problemática que quiere cometer homicidio en contra de su esencia, pero tal vez no, así que las dudas me dan permiso para hablar de estas estupideces. 

JAJAJA, pobrecitos ustedes.

Comienzo a entender a las personas que dicen "Conoce a una persona, si llegas a detestarla profundamente sin que te haya hecho nada malo es porque se parece demasiado a ti" VERGA, SÍ.

Porque si mi esencia es un virus sin cura a mi parecer, quiere decir que todo el que tenga algo parecido a mí va a ser la verga de detestable.

¿Y si me odio tanto por qué no me cambio yo misma? Es que no me odio vale, yo me amo... Pero me detesto.

Ve, no soy bipolar, ni loca, ni complicada. Quizá mi forma de ser no sea tan mala, porque obviamente todos creemos siempre que pensamos lo mejor, aunque queremos mejorar. Siempre vamos a querer tener la razón, pensar que somos muy buenas personas y que quizá no estamos tan mal como muchos. Pero no es verdad, todos somos la misma verga.

Y ahí es donde entra mi odio a la engreída presidenta de mi razonamiento, ¿POR QUÉ COÑO YO TENGO QUE CREER QUE LO QUE YO HAGO O DIGO ESTÁ BIEN Y EL RESTO NO? O QUIZÁ NO PIENSE QUE EL RESTO ESTÁ MAL PERO... COÑO YO TENGO LA RAZÓN Y PUNTO... Aunque acepte que me equivoqué.

JAJAJAJA, "I'M NOT CRAZY, MY MOTHER HAD ME TESTED" como dice Sheldon Cooper.

La engreída siempre me da la última palabra, y por estúpida siempre le doy la razón, aunque la orgullosa quiera estrangularla con una manguera de hierro forjado.

En fin, la odio pero la amo. Porque soy yo, con todos mis errores, ego, y la porquería que viene enlazada a mi existir. Sin las cosas que me molestan terminaría siendo una masa gris de esas que usan para rellenar los bloques de una pared. Nadie les para bolas, simplemente están ahí y todo el mundo trata de tapar esas uniones grises porque se ven horribles.

A MÍ NADIE ME TAPA. 

Creo que ahorita llegó el down de la historia, porque pepegrillo se adueñó de la asamblea otra vez y amarró  a la loca a una silla. La conciencia vuelve justo a tiempo para decirles que no está mal ser uno mismo, mientras te ames tanto como te detestes... Cuando se desequilibre la balanza es que tienes problemas.

Tómense un chocolate caliente por mí, porque los cupcakes que me comí hoy tenían tanto chocolate que me empalagaron... La gloria hecha ponquesito.

Gnight cookies, les prometo que trataré de no abandonarlos tan feo.